Por la tarde me detengo a contemplarte,
me detengo por verte y admirarte,
cada pedazo de cielo que tu cuerpo posee,
cada detalle que en la noche hace que jadee,
y me hallo en tu rostro bebiendo dulces sabores,
con mis labios calientes que te provocan calores,
son tus pies como tu cuerpo reflejado,
la belleza compacta del blanco y el rosado,
son tus bellos, cálidos y brillantes ojos
los que al mirarme fijamente me ponen colorado,
tu voz me acaricia desde el alma hasta los poros
tu cabello se mueve, el viento te toca,
saliste de un cuento niña de la roja boca,
tus pechos las cumbres donde mis labios se alojan,
mis manos con caricias tu piel abordan,
te daré calor muy dentro donde nace la vida,
tus piernas mojadas apretarán la salida,
soy tuyo… el que nació para adorarte,
toda la noche angelita mía yo voy a amarte.
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